Mario Isea, embajador de Venezuela en España, fue convocado este lunes por el Ministerio de Exteriores español para trasladarle “el rechazo y el malestar” del Gobierno de Madrid por los “inaceptables insultos” de Nicolás Maduro hacia el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy.
“El Gobierno español lamenta que el presidente de la República Bolivariana de Venezuela recurra reiteradamente a afirmaciones irrespetuosas que en nada ayudan a mejorar la relación”, afirmó Exteriores en un comunicado.
A la salida de la reunión, que duró poco más de quince minutos, el embajador de Venezuela ha eludido responder a las preguntas de los informadores y se ha limitado a señalar que no iba a “declarar nada”.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, criticó este domingo en una alocución televisada las medidas de ajuste económico exigidas a Grecia por líderes europeos, a quienes llamó “sicarios”, y nombró expresamente al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy.
“Ahí (en Grecia) va a pasar algo. Otro sicario de Europa es Rajoy. Son sicarios; Rajoy es un sicario del pueblo”, dijo Maduro.
Se refirió asimismo a la ley de Seguridad Ciudadana aprobada en España con la cual, dijo, Rajoy le ha dado “una puñalada a la democracia” en nombre del (exjefe del Estado español) Francisco Franco (1936-75).
La respuesta de España ha sido convocar al embajador venezolano, por segunda vez en esta legislatura, para trasladarle su rechazo y malestar por estos nuevos insultos de Maduro a Rajoy.
El departamento que dirige José Manuel García-Margallo insiste en la nota que ha hecho pública tras reunirse al embajador venezolano en el deseo de España de mantener unas “relaciones constructivas” con el Ejecutivo de Maduro.
“El Gobierno de España quiere subrayar una vez más su deseo de mantener con el gobierno de Venezuela relaciones constructivas, más allá de nuestras diferencias, fundamentadas en el diálogo y el respeto mutuo, desde los lazos fraternales que unen a nuestros dos países y a nuestros pueblos”, afirma el comunicado.
Esta es la segunda vez en tres meses que España convoca al embajador de Venezuela. La última fue el 15 de abril, para trasladar su malestar por los “insultos y amenazas” contra España de Nicolás Maduro al tachar a Mariano Rajoy de “racista”.
La llamada a consultas es una herramienta de protesta diplomática que supone la retirada temporal del embajador durante un periodo de tiempo indeterminado, aunque Pérez-Hernández y Torra regresó a principios de mayo a Caracas.
Las relaciones entre España y Venezuela han atravesado una serie de desencuentros desde que, en octubre pasado, Lilian Tintori, esposa del opositor Leopoldo López, fue recibida por Rajoy, en calidad de líder del PP.
Con información de El Nuevo Herald.