Familias venezolanas enteras han tenido que salir del país en busca de mejores oportunidades, sin escapar el tener que enfrentar duras realidades.
Un grupo de niños venezolanos que huyeron del país junto a sus progenitores por la crisis, recorren la ciudad de Huacho en Perú, vendiendo tizanas y sus padres arepas como medio de ingreso.