Joel Urribarrí, presidente de la Cámara de Cementerios y Crematorios de Venezuela, afirmó que los cementerios, crematorios y funerarias del país requieren de inversión para ofrecerle a los ciudadanos opciones más económicas.
“El gobierno debe mejorar los servicios públicos del ramo. Nuestro sector es minoritario”, dijo.
Asimismo, indicó que el Estado controla la mayor parte de los servicios funerarios públicos, pero que los tiene “abandonados”.
“El Estado controla 70% de los servicios de inhumación, crematorios y funerarios. Los cementerios públicos están muy abandonados. Por eso la gente busca el ámbito privado para darle digna sepultura a sus seres queridos”, acotó.
Igualmente, destacó que muchos ciudadanos no poseen los medios para enterrar o velar a sus familiares y que las alcaldías “han donado” los servicios.
“Casi todos los crematorios y cementerios a nivel nacional tenemos convenios con las alcaldías. A los que son pobres de solemnidad, les donamos los servicios”, manifestó.
Por último, detalló que montar una funeraria actualmente tienen un valor aproximado de 500.000 dólares, razón por la cual existen algunas poblaciones venezolanas que no cuentan con servicios funerarios.
“Actualmente un cremador está alrededor de 120.000 dólares. La inversión total ronda 500.000 dólares y no es nada sencillo la recuperación de ese capital”, expresó.
Redacción Maduradas con información de El Nacional.