Cuando faltan solo días para el Día del Maestro, el ministro chavista de Educación, Aristóbulo Istúriz, reconoció que los trabajadores venezolanos son las principales víctimas de los salarios de hambre, y que ni los subsidios, otorgados a través de los bonos, son suficientes para afrontar los estragos de una economía hiperinflacionaria.
«Aquí para el golpear el salario no es necesario golpear al trabajador. Tú golpeas la moneda y les estás golpeando su poder adquisitivo. E imagínate lo que era antes 10 millones de bolívares y ahora tú entregas un bono de 10 millones y no es nada», expresó durante una entrevista ofrecida a Venezolana de Televisión (VTV).
«Nos agarra este Día del Maestro en una situación económica dura. Para el maestro como para todos los trabajadores. Por La guerra económica, el bloqueo criminal, las sanciones unilaterales y el daño que le hizo la Asamblea Nacional (electa en 2015) al salario de los trabajadores», argumentó el funcionario chavista.
Este martes 12 de enero, Nicolás Maduro anunció que se tiene previsto para febrero el regreso paulatino a clases de manera presencial, luego del largo período bajo la modalidad a distancia por la pandemia del COVID-19.