Moisés Cordero, estudiante de 19 años que perdió un ojo tras la represión sufrida durante una protesta en Carabobo, afirmó que no teme manifestar nuevamente.
El pasado 23 de febrero, cuando protestaba frente a la 41 Brigada Blindada de Carabobo para exigir el ingreso de la ayuda humanitaria, Cordero vio que desde la instalación castrense comenzaron a disparar perdigones y lacrimógenas.
De pronto sintió que no veía bien, pero siguió corriendo, no sabía exactamente lo que pasaba, se pasó la mano por el rostro y confirmó que tenía sangre. Desconocía la magnitud de la herida hasta que en la clínica se lo dijeron: perdió el ojo derecho.
«Seguiré luchando por mi país, y esto no es algo de uno solo, es de todos. Esto no me va a detener. Ciertamente me quitaron una parte muy importante, pero no quitaron mis ganas de seguir adelante, mi convicción, porque no voy a dejar que sigan robando nuestro futuro», manifestó.
Al joven un perdigón le alcanzó el ojo de forma directa, no perdió la vida porque sus lentes para la miopía evitaron que la bala entrara con más fuerza. Tuvieron que operarlo para extraerle los restos del perdigón y del ojo que no pudo ser recuperado, pero antes de entrar a quirófano tuvo que salir de la clínica porque funcionarios de cuerpos de seguridad lo estaban buscando. Fueron horas de angustia, pero pudo regresar y ser atendido.
Redacción Maduradas con información de Caraota Digital.
Lea también:
¡DE FRENTE! Guaidó llama a marchar el #1May: “Todos alzaremos la voz por el cese de la usurpación”