Un grupo de depositantes libaneses tomó como rehenes a empleados y clientes de un banco de Beirut para exigir que se les diera acceso a sus ahorros bloqueados por la crisis económica que atraviesa el Líbano, entre ellos una mujer se roció con gasolina y amenazó con prenderse en fuego.
Este es el segundo asalto de este tipo que ocurre en Beirut, pues en agosto pasado un hombre tomó como rehenes a empleados y clientes de un banco para pedir la devolución de 210.000 dólares que había depositado en el mismo.
La Asociación Sarja (grito) de Depositantes, informaron que algunos de sus miembros tomaron una sucursal del Blom Bank, ubicada en el barrio de Sodeco.
«Una depositante amenazó con quemarse después de verter gasolina sobre los empleados y ella misma«, explicaron a través de Facebook.
La mujer quería retirar parte de sus ahorros para poder pagar el tratamiento que requiere su hermana quien está enferma de cáncer. Con su acción, la depositante logró retirar 20.000 dólares de sus ahorros.