El vicepresidente Tareck El Aissami como que llegó a su recién asumido puesto cortando «rabo y orejas». Este martes, anunció la destitución del presidente de Pequiven, Juan Carlos Depablos Contreras, por presuntos «hechos irregulares».
“Hace pocas horas, el presidente Nicolás Maduro hizo un llamado a un presidente de una empresa del Estado. Bastaron pocas horas para investigar y descubrir un poco de irregularidades y hechos graves de corrupción. Y hemos removido de manera inmediata al presidente de Pequiven y está ahora detenido para que rinda cuenta respecto a los hechos irregulares que ahí se detectaron”, destacó.
Informó también que fue designado como presidente de la empresa un «hijo del 4 de febrero, leal al comandante Chávez», el mayor Rubén Ávila Ávila, junto a Natasha Castillo.