Joao Miguel, de 2 años, falleció luego de que su padre Mateus Henrique Leroy Alves, de 37 años, gastara el dinero que habían recaudado para tratar la enfermedad degenerativa que sufría su hijo.
En este sentido, el portal Mirror informó que Alves habría utilizado los 600.000 reales brasileros para costear viajes de lujos, comprar drogas y asistir a burdeles. El dinero era equivalente a 150.000 dólares.
A pesar de conocer que su hijo sufría de atrofia muscular espinal tipo 1, una grave enfermedad degenerativa, Alves prefirió utilizar el dinero para beneficio propio.
Asimismo, destacó que Karine Rodrigues, madre del niño, fue quien difundió la historia del pequeño para poder tratar la rara enfermedad que afectaba al pequeño.
Sin embargo, sus sospechas iniciaron cuando su esposo decidió hacer un viaje lujoso a la ciudad de Salvador en el estado de Bahía, al este de Brasil, sin su compañía.
Ante esta decisión, la mujer acudió a la policía para que investigaran los fondos que eran destinados para su hijo. Le fue notificado que se habrían retirado grandes cantidades de dinero.
Tras este descubrimiento, la policía arrestó a Alves cuando regresó de su viaje de lujo que duró 3 días.
Redacción Maduradas con información de Mirror.