El ex embajador de la Organización de Estados Americanos (OEA) Guillermo Cochez solicitó que fiscales anticorrupción de la Procuraduría General de Panamá investiguen al vicepresidente Tareck el Aissami y a su socio Samark López.
La solicitud pretende determinar si cometieron delitos contra el orden económico, en la modalidad de blanqueo de capitales, en Panamá. Esto después de que se comprobó que una empresa de ambos apareció en el registro negro de la Oficina de Control de Recursos Extranjeros (Ofac) o en la Lista Clinton, como también se le conoce, por supuestamente estar implicados en narcotráfico y lavado de dinero.
Para el diplomático, tanto El Aissami como López pudieron atentar contra la seguridad colectiva en una clasificación, según leyes panameñas, de “terrorismo y financiamiento del terrorismo”.
Cochez declaró que “López se encargaba de abrir cuentas en Estados Unidos y de crear empresas fantasmas en legislaciones como Panamá, Barbados, Venezuela, y Estados Unidos, entre otros, para enviar y recibir el dinero del Vicepresidente venezolano”.