Este miércoles, 1 de mayo, se produjo a nivel nacional diversas protestas en contra del régimen de Nicolás Maduro y a favor del cese de la usurpación promovido por el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó.
Como consecuencia de las manifestaciones, funcionarios de seguridad afines al régimen arremetieron en contra de la ciudadanía.
Los efectivos lanzaron bombas lacrimógenas y perdigones en contra de los manifestantes. Algunas de las herramientas de represión afectaron a personas que poco o nada tenían que ver con las protestas, como fue el caso de los pacientes del Hospital Pablo Acosta Ortiz de San Fernado de Apure.