La Policía de Bolivia pidió este lunes 11 de noviembre la intervención del Ejército, tras declarase «rebasada» por los grupos violentos que protestan en las calles de ese país, en rechazo a la renuncia de Evo Morales como presidente.
El comandante de la Policía Boliviana en La Paz, Antonio Barrenechea, manifestó que los policías llevan 21 días movilizados y confesó la imposibilidad de dicho cuerpo de seguridad de sostener la situación por más tiempo.
“No vamos a permitir que haya un solo muerto en el lado de la Policía Boliviana, no puedo permitirlo, mi responsabilidad es grande (…) No me quiero llevar muertos la hombro», expresó.
Asimismo, aseveró que los manifestantes no son pacíficos, tienen armas de fuego y por tanto su «intención es matar».