¿Tabla de salvación?Luis Almagro invocó la Carta Democrática Interamericana sobre Venezuela, el secretario general de la OEA decretó el documento en base a las constantes violaciones a los derechos humanos y la profunda crisis en la que se sumerge el país. Dicho argumento puede significar una vía de escape a la situación en Venezuela, aquí te lo explicamos.
Almagro, informó hoy que invocó la Carta Democrática Interamericana, conforme al artículo 20, el cual establece: «En caso de que en un Estado Miembro se produzca una alteración del orden constitucional que afecte gravemente su orden democrático, cualquier Estado Miembro o el Secretario General podrá solicitar la convocatoria inmediata del Consejo Permanente para realizar una apreciación colectiva de la situación y adoptar las decisiones que estime conveniente«.
El 19 de mayo, el diputado Luis Florido hizo pública la solicitud de la activación del instrumento. En su cuenta de Twitter subió un documento, que contiene argumentos establecidos en el artículo 3 de la Carta Democrática sobre los elementos esenciales de la democracia representativa, como el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales, la celebración de elecciones periódicas, libres, justas y basadas en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo; el régimen plural de partidos y organizaciones políticas y la separación e independencia de los poderes públicos.
Igualmente, cita el artículo 1 del instrumento, que señala que «los pueblos de América tienen el derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de promoverla y defenderla». Luego, el texto indica que «estos elementos esenciales (…) no se cumplen actualmente en Venezuela, pues (…) en la actualidad la situación en Venezuela es de un deterioro sin precedentes«.
De acuerdo con el internacionalista Félix Gerardo Arellano, la Carta Democrática es la defensa de la democracia, tanto en sus orígenes como en su funcionamiento. «Que no se tumben democracias con tanques, pero que tampoco se militaricen y destruyan».
Tras la solicitud de Almagro, habrá una votación en el Consejo Permanente de la OEA para consultar si se acepta o no la discusión de la situación en Venezuela. De los 34 miembros que pertenecen al organismo internacional, se requieren 18 votos a favor para que el asunto sea abordado.
Si se acepta el tema, empieza el debate sobre el país. Después, un grupo de diplomáticos intentará a través del diálogo que en Venezuela se supere la alteración constitucional. La comisión buscará demostrar los irrespetos a la Constitución, explicó Arellano.
El gobierno podría reaccionar negativamente ante la delegación, «ahí sí vendrían palabras mayores», expresó. Entonces se consultaría si se necesita la realización de una Asamblea General Extraordinaria, para la cual se necesitan 24 sufragios.
«Esa Asamblea sí pudiera aplicar sanciones. Podría suspender temporalmente a Venezuela de la OEA, por ejemplo«.
El internacionalista advirtió que ya es negativo que se hable sobre Venezuela en la OEA, porque conllevaría a que cada vez menos financistas quieran invertir en el país. «Que se hable de la Carta y que no haya respeto jurídico son precedentes negativos. ¿Cómo buscar comercio con esos antecedentes? La nación se está cerrando ante el mundo. El gobierno tiene que cambiar su conducta porque (…) podría entrar en la onda de Corea del Norte y aislarse completamente».
Señaló que el instrumento solo funciona como mecanismo de presión política. La OEA no tiene poder para cambiar el gobierno, pero puede apoyar la activación del referéndum revocatorio este año. Descartó que el organismo pueda promover una invasión militar contra Venezuela.
Con información de El Nacional