Tarek William Saab, fiscal general designado por la extinta asamblea nacional constituyente (ANC), reveló este miércoles 6 de julio el nombre del autor intelectual del secuestro, desaparición y asesinato del profesor universitario Carlos Lanz, a casi dos años del hecho.
Saab aseguró que su esposa, Mari Cumare, pagó $8.000 a un hombre que se identificó como su amante, Glenn Castellano, para que se encargara de buscar sicarios que ejecutaran el homicidio. La petición del crimen la hizo tres meses antes de la desaparición del sociólogo, quien fue visto con vida por última vez el 8 de agosto de 2020.
“Este hecho fue tan minuciosamente organizado, que tuvieron la coartada perfecta para el crimen perfecto, así lo revelaron dentro de sus tertulias necrofílicas”, puntualizó.
A través de las redes sociales, se conoció que Cumare y una de sus hijas habrían sido detenidas este martes 5 de julio por funcionarios de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
La exdefensora del pueblo Gabriela Ramírez informó que también habrían sido arrestados Tito Viloria, su esposa e hija, y dos trabajadores del hogar de los Lanz, así como una segunda hija del exguerrillero.
Saab señaló que hasta ahora 13 personas se encuentran encarceladas por su supuesta vinculación en el caso. “Las imputaciones continúan, no descarto nuevos detenidos en el caso. Siguen las investigaciones”, advirtió.
“Hoy, con pruebas irrefutables, contundentes y demoledoras, revelamos el por qué, cuándo y donde ocurrió este abominable crimen y señalaron indignamente al Estado venezolano”, resaltó.
El fiscal general del régimen de Nicolás Maduro afirmó que dirigió la investigación de forma personal, la cual consideró que tiene “un valor importante” tanto para el Ministerio Público (MP) como para los órganos auxiliares de justicia. “Desde el sábado entrevisté personalmente a los autores materiales del caso, y seguirán las investigaciones”, prometió.
Hipótesis inicial
Durante una rueda de prensa ofrecida para revelar detalles sobre el asesinato del dirigente de izquierda, Saab recordó que al inicio de las investigaciones manejaron “la tesis que la extraña y enigmática desaparición del profesor Carlos Lanz fue voluntaria”.
“El llamado -Comité de Búsqueda-, una suerte de fiscalía paralela, manifestaba su enojo porque las comparecencias públicas insistimos en esta tesis, que la desaparición fue voluntaria. No había elementos que determinaran un hecho violento. Nunca descartamos cualquier otra tesis, aunque ellos decían que había incluso una posible incursión de mercenarios extranjeros”, explicó.
Asimismo, destacó que siendo Lanz un exguerrillero y alguien de “larga trayectoria, no iba a salir en plena cuarentena radical, en pandemia, con cualquier persona, tenía que ser alguien de su extrema confianza”.
Desaparición
El 20 de agosto, Cumare informa que salió de su casa a las 8:00 de la mañana del día de la desaparición de su esposo y que Lanz se encontraba en la vivienda. Añadió que su hija se percató a las 11:00 am que el sociólogo no estaba en la propiedad.
Un día después, el 9 de agosto, el MP fue notificado sobre la desaparición del profesor universitario. Al menos una docena de fiscales estuvieron avocados al caso.
Poco tiempo después, una doméstica que trabajó con el matrimonio durante dos décadas cambia de residencia.
“Siete días antes del lamentable suceso, se va de la casa, por qué la sacan de la casa, si tenía 20 años viviendo allí, en plena pandemia, cuarentena radical… la sacan de la casa y se traslada de Maracay a Mene Grande, estado Zulia”, expresó.
Durante los interrogatorios, la empleada doméstica se refirió sobre la hostilidad que había entre la pareja Cumare-Lanz y ofreció daros sobre relaciones extramatrimoniales de la esposa.
Los amantes de más larga data de Cumare fueron identificados como Oliver Medina y Glenn Castellano. Este último hombre nunca dejó de ser su pareja y también tenía antecedentes penales por robo de bancos y de vehículos en Tocorón, pagando varios años de cárcel por ello.
Oliver Medina admitió que para el momento del suceso tenía una relación sentimental con Cumare, paralela a la que ella tenía con el profesor y Castellano.
Asimismo, Darwin Zambrano, expareja de la hijastra de Lanz, decide hablar sobre los turbios comportamientos de Cumare contra el profesor Lanz, entre los que se encontraban agresiones verbales y hasta físicas contra la víctima.
“Ella tiene el perfil psicológico que sufre del trastorno de personalidad límite fronteriza y el trastorno de Borderline, altamente inestable en sus relaciones familiares, agresivas, narcisista, impulsivas, que se convierten en sociópatas, no les importa si caen presos, su moral, la de su familia”, señala.
Además, comenta que Cumare podría tener otros amantes, además de Medina y Castellanos.
Móvil
Saab precisó que Castellanos delató a Cumare en los interrogatorios. Aseveró que la mujer le pidió que “el cadáver nunca deberá encontrarse”.
Al mismo tiempo, detalló que los $8.000 se dividieron de la siguiente manera: $5.000 para un pran de Tocorón y $3.000 tanto para los dos sicarios y para él como el facilitador de esos homicidas. El monto fue cancelado en billetes de $50 y $100.
Castellano también confesó que el supuesto móvil del secuestro era el dinero procedente de la corrupción en el INCE Maracay.
Declaró que Cumare hizo blanqueo de capitales a través de testaferros. También adquirió dos apartamentos, una casa en la playa en Tucacas, fincas en Cojedes, vehículos, entre demás bienes. Identificó al dirigente Viloria como presunto testaferro.
Asesinato
Viloria sería el responsable de sacar a Lanz de casa el día de su desaparición, al decirle que iban a acudir a una reunión en Mariara con milicianos, “porque hay una conspiración contra el gobierno”.
Lo traslada en un Mitsubishi azul y atrás iba una camioneta Explorer azul, con los sicarios.
A la altura de Yagua, la camioneta Explorer intercepta al vehículo donde iba Viloria con Lanz, y lo llevan con destino a la Finca la Fortaleza, en Cojedes.
En presencia de Viloria y Castellano, los sicarios le propinan dos disparos en la sien, el 8 de agosto de 2020.
“Si me van a matar, que sea de pie”, habría dicho Lanz, según Castellano.
Castellano vuelve al INCE Maracay, para mantener la coartada con Cumare. Sin embargo, nunca pudo explicar por qué un sábado en la tarde hizo un operativo de limpieza, cuando el país se encontraba en plena cuarentena radical.
Saab señaló que Elis Becerra preparó el 7 de agosto una fosa cerca del potrero de la finca la Fortaleza. “El luminol dio positivo, hubo rastros de sangre y de masa encefálica”, indicó.
La confesión de Castellano explica que el cuerpo cae en la fosa, no obstante, mueven el cadáver entre los dos sicarios y el capataz, lo desnudan y ponen en una sábana plástica dentro en una cochinera, donde se encontraban nueve cerdos, que se encargarían de finalmente hacer desaparecer los restos de Lanz.
Los sicarios utilizaron dos machetes y junto al capataz, mutilaron el cadáver, comenzando por brazos, manos, tronco y pies, luego lanzaron los restos a la cochinera, para que los animales se lo comieran.
“Identificación de zonas donde nuestros expertos de la unidad criminalística, al pasar el luminol detectaron rasgos de sangre, en una zona fronteriza colindante a la Finca la Fortaleza, ubicada en Cojedes”, concluyó Saab.