En un santiamén el río Caramate del estado Aragua, se llenó de gente. Sus caudalosas aguas no pudieron detener el ímpetu y la voluntad de todo un ejército de venezolanos que se mantienen luchando por el país que quieren de vuelta.
No importaron las trancas en las vías, los árboles o la basura atravesada en carretera. Los aragüeños se pusieron las alpargatas y salieron a las calles, y hasta a los ríos, para defender sus derechos y cumplir con el revocatorio que promete sacar a Nicolás Maduro del poder.
A través de las redes sociales se difundieron varias fotografías del momentazo que pocos se atrevían a creer. Esto sin duda evidencia una vez más que Venezuela quiere cambio y ese cambio no se detiene por nada ni por nadie.