Una trabajadora del Hospital José Gregorio Hernández, en Los Magallanes de Catia, se las cantó toditas a Nicolás Maduro por no pagarle buenos salarios a los empleados del sector salud.
En medio de una protesta para exigir mejores sueldos, la mujer, llamada Iris, dijo: «Yo quisiera que él (Maduro) llegara aquí, porque yo me siento competente, para gritarle en su cara, señor presidente, que no sea tan miserable«.
Afirmó que Maduro sí tiene dinero suficiente para vivir, a diferencia de los trabajadores, que a duras penas ganan salario mínimo.
«Cómo va a decir que nos quiere. Él no nos quiere, porque si nos quisiera este problema estuviera resuelto«, expresó.