Las autoridades panameñas detuvieron este jueves a tres personas por tráfico ilegal de migrantes y liberaron a una veintena de víctimas en distintos puntos del país.
El Ministerio Público informó en sus redes sociales que las detenciones tuvieron lugar en Chiriquí (provincia fronteriza con Costa Rica), Panamá Oeste (a las afueras de la capital) y Darién (en la selva que hace de frontera natural con Colombia).
“En estos momentos la Fiscalía Primera Contra el Crimen Organizado @ProtegeryServir (Policía Nacional) y @senafrontpanama (Servicio Nacional de Fronteras) realizan un operativo por tráfico ilícito de inmigrantes en Chiriquí, Panamá Oeste y Darién”, indicó la Fiscalía en su cuenta de Twitter.
“Hay 19 personas rescatadas y 3 aprehendidas”, agregó la institución, que no especificó la nacionalidad de los detenidos ni de las víctimas.
Debido a su pujanza económica y a su estabilidad sociopolítica, Panamá ha sido en los últimos años uno de los destinos más elegidos por muchos migrantes de la región, principalmente venezolanos, colombianos y centroamericanos.
Panamá también es un país de paso para miles de migrantes procedentes de todo el mundo que buscan llegar a Estados Unidos.
El delito de trata de personas tiene distintas versiones, como la esclavitud laboral, el tráfico de órganos, el tráfico de migrantes o la explotación sexual, recordó la funcionaria.
En Panamá, que reconoce la trata como un delito desde 2011 gracias a la aprobación de la Ley 79 e impone penas de hasta 20 años de cárcel, el más frecuente es la explotación con fines sexuales y la mayoría de las víctimas son extranjeras.
La ONU calcula que la trata es una actividad ilícita que mueve anualmente 32.000 millones de dólares en todo el mundo, solo por detrás del narcotráfico, y el 70 % de sus víctimas son mujeres.