Alex Saab, empresario colombiano señalado de ser el testaferro de Nicolás Maduro, podría ser extraditado a la ciudad de Miami, en Estados Unidos, para recluirlo en el Centro Federal de Detención, muy cerca del American Airlines Arena. Así lo informó la periodista Mariana Reyes en Twitter.
Señaló que el fiscal principal de este caso, a quien corresponden las diligencias de extradición, es Michael Nadler. Junto con las autoridades de la Administración para el Control de Drogas, del Buró Federal de Investigaciones y del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, levantó los cargos por el presunto lavado de dinero contra Saab en julio de 2019.
«Dependerá de las rápidas gestiones del fiscal Nadler y de las relaciones diplomáticas de ambos países que Saab termine en manos de la justicia estadounidense. Aunque entre Cabo Verde y Estados Unidos no existe acuerdode extradición, eso no impide que las autoridades federales estadounidenses hagan la solicitud a través del ‘paquete’ de extradición», expuso.
Reyes indicó que la administración actual de Cabo Verde ha priorizado las relaciones con Estados Unidos y Europa, un escenario que evidencia con la vigencia de distintos acuerdos bilaterales entre ambos países. Uno de ellos en materia de seguridad, acotó.
La periodista dijo que las posibilidades de éxito en este proceso de extradición del empresario colombiano son altas. Aseguró que fiscales y diplomáticos se mueven con rapidez para evitar que Saab termine siendo salvado por el régimen de Nicolás Maduro, como ocurrió con el diputado y prófugo de la justicia Hugo Carvajal.
La ubicación estratégica de Cabo Verde lo convierte en un socio importante en la lucha contra el tráfico de drogas, armas y personas. En septiembre de 2019, Estados Unidos y Cabo Verde firmaron una Carta de Acuerdo bilateral en materia de apoyo de justicia penal.
Reyes subrayó que la seguridad de Estados Unidos, la lucha contra narcóticos y la asistencia policial buscan desarrollar la capacidad de los militares y la policía de Cabo Verde para responder de manera efectiva a desafíos de seguridad, incluidos el crimen, el lavado de dinero y el tráfico de drogas.