El diputado a la Asamblea Nacional (AN) Marco Bozo Tamayo tuvo que intervenir para que los médicos de la maternidad del Hospital Central de Valencia atendieran a una mujer que estaba en trabajo de parto.
La fémina se encontraba en la parte externa del centro asistencial mientras las personas que le acompañaban pedían que la atendiera, porque con 40 semanas de gestación estaba a punto de dar a luz.
Al sitio llegó el parlamentario, y tras ser informado de lo que sucedía, ingresó de inmediato al centro hospitalario para exigir a los trabajadores que cumplieran con sus labores y atendieran a la mujer.
El diputado cuestionó a los trabajadores del lugar por ignorar a la paciente: «Nadie atiende a una mujer que tiene 40 semanas de gestación, lista para parir. La indolencia sigue».