El descaro del empresario colombiano Alex Saab no tiene límites. En una entrevista ofrecida a la periodista Nathali Gómez para Russia Todayaseguró ser uno de los proveedores «más grandes» de “alimentos” para el CLAP.
«Aunque no soy el único proveedor del programa, soy uno de los más grandes. Genero actualmente unos 100.000 empleos en Venezuela en diferentes sectores», expresó el barranquillero que hoy cumple casa por cárcel en Cabo Verde, mientras se define si es extraditado o no a Estados Unidos.
Señaló que en 2011 comenzó con la organización de la logística de un «importante» contrato de viviendas sociales y luego, el régimen de Nicolás Maduro le otorgó el primer contrato para convertirse en proveedores de alimentos en 2015.
«Una vez más, cumplimos con los plazos y el presupuesto. Me basé en ese éxito inicial y hoy, al contrario de las acusaciones infundadas de algunos medios de comunicación», agregó.
Por otro lado, expresó sentirse honrado y agradecido por ser nombrado enviado especial del Gobierno de Venezuela en abril de 2018, lo que le ayudó, según dijo, a colaborar en el abastecimiento y suministro de alimentos básicos y medicamentos en Venezuela.
Sin embargo, hay un importante detalle que Saab no mencionó en la entrevista y es la calidad de los productos y que no cubren las necesidades nutricionales elementales para los ciudadanos.
En 2019, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, alertó que las cajas CLAP no cubren las necesidades nutricionales de la población.
“El principal programa de asistencia alimentaria, conocido como ‘cajas Clap’, no cubre las necesidades nutricionales que son elementales para la gente«, advirtió en un informe elaborado por su Oficina tras su visita a Venezuela.
Redacción Maduradas con información de RT
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