El régimen de Nicolás Maduro anunció este lunes 3 de enero que el hospital de guerra que estaba trabajando en las inmediaciones del Poliedro de Caracas para atender a los pacientes con covid-19, fue cerrado por tener “pocos pacientes”.
La información fue suministrada por el ministro de salud, Carlos Alvarado, durante una alocución oficial.
“Cerramos el poliedro de Caracas justamente porque teníamos muy pocos pacientes y es una situación que, para poder mantenerla, tenemos que vacunarnos. Es la tarea inmediata y que está iniciando en todo el territorio nacional”, dijo.
Alvarado aseguró que en el Hospital Dr. Miguel Ángel Rangel, en la parroquia Coche, hay solo 8 camas ocupadas de las 70 dispuestas para pacientes contagiados, indicando que la vacunación es necesaria para que se mantenga el control que hasta ahora, dijo, han logrado las autoridades venezolanas sobre la pandemia: 5 casos por cada 100.000 habitantes.
El ministro de salud informó que la primera semana del mes de enero serán inmunizados con la vacuna de refuerzo el personal que labora en los diferentes centros de salud del país.
“Esta semana será el personal de salud de primera línea, inmediatamente, los 500 mil trabajadores de la salud y, a partir de la semana que viene, los mayores de 60 años”, detalló.
Por su parte la vicepresidenta del régimen, Delcy Rodríguez, indicó que los hospitales deben trabajar en conjunto con el régimen para aplicar esta vacuna de refuerzo contra el covid-19 a sus trabajadores.
«Centro de salud que no haya iniciado la vacunación, debe inmediatamente contactar a las autoridades para que se aplique la vacuna de refuerzo al personal de salud», sentencio.