El interior del país se han mantenido en protesta por la falta de efectivo y alimentos propiciado por el cese de circulación de los billetes de 100 bolívares, manifestaciones legitimas que fueron aprovechadas por oportunistas para saquear a los comerciantes.
En varias poblaciones del estado Bolívar las personas salieron a tomar lo que se les pasara por delante, al punto que cargaron con neveras y cajas de comidas en motos. Otro tanto hizo lo propio pero a pie, causando grandes destrozos en las empresas locales.