El martes, 15 de octubre, el régimen de Nicolás Maduro rechazó enérgicamente el informe publicado por la Misión Internacional Independiente de Determinación de los Hechos del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Este informe reveló graves violaciones al debido proceso contra personas detenidas por participar en las protestas tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024.
«Esa misión mercenaria jamás ha pisado Venezuela. Sin embargo, ha derrochado más de seis millones de dólares en propaganda política en favor de la derecha fascista venezolana», señala el escrito.
La representación de Venezuela ante la ONU en Ginebra calificó el informe como un «panfleto» y un «documento novelesco», alegando que es una herencia del difunto Grupo de Lima y del gobierno estadounidense.
El chavismo argumentó que la misión de la ONU utiliza una metodología y fuentes de información cuestionables, basándose en relatos de redes sociales y propaganda política en favor de la oposición venezolana.
Redacción Maduradas
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