Este jueves 2 de mayo, el fiscal general del régimen madurista, Tarek William Saab, dijo que los opositores Leopoldo López y Julio Borges, ambos exiliados políticos venezolanos, habrían recibido beneficios por más de $1,000 millones, a través de contratistas ligados a la trama de corrupción «Pdvsa-Cripto», presuntamente, dirigida por el exministro Tareck El Aissami.
En rueda de prensa, Saab mostró un video en el que el empresario Samark López, quien también se encuentra detenido por ser, supuestamente, «testaferro» de El Aissami, dijo que, entre 2020 y 2022, la directiva de Pdvsa continuó asignando petróleo a través de contratistas que estaban ocultos tras empresas españolas.
«Son al menos dos contratistas venezolanos que tienen una estrecha vinculación con los partidos Primero Justicia (PJ) y Voluntad Popular (VP)«, detalló López.
Según el hombre, parte de las ganancias obtenidas por el comercio eran repartidas en comisiones, de las cuales, una parte, iba a parar en financiamientos de actividades políticas.