Parece que Nicolás Maduro quedó tocado por la lluvia de «amor» (a punta de huevos) que recibió este martes en San Félix, estado Bolívar. Ahora cree que una multitud de venezolanos viajó a la playita en Semana Santa cuando es evidente que la mayoría se quedó para protestar en las calles contra su dictadura.
«Me informan que hasta esta hora se han movilizado 8.565.761 de compatriotas hacia distintos destinos turísticos y religiosos del país en paz», escribió el presidente rojo rojito por su cuenta de Twitter.
Nico también aprovechó para felicitar a los más de 200.000 efectivos de seguridad que están trabajando en el operativo Semana Santa 2017 y que probablemente les ha tocado reprimir (como de costumbre) las manifestaciones populares que se han presentado estos días en toda Venezuela.
Para el presidente, todo en el país está en paz, a pesar de que ya van al menos cinco muertos producto de las represiones brutales que las fuerzas de seguridad a su servicio han aplicado en protestas de un pueblo ya cansado de esta dictadura.