Una tremenda vergüenza fue la que se vivió este martes en el estadio Metropolitano de Mérida, cuando en pleno choque entre la Vinotinto contra Brasil, el partido debió ser interrumpido porque el estadio se quedó sin luz.
Así como usted lo lee: en un juego de las eliminatorias mundialistas, la acción se tuvo que detener y no por causas o impedimentos naturales.
La selección de Brasil iba arriba en el marcador (2-0) cuando se fue la luz.
Los asistentes se molestaron por el vergonzoso incidente y aprovecharon la ocasión para gritar: «revocatorio».