Este jueves el gobierno de Nicolás Maduro expulsó al vicecónsul colombiano, Juan Carlos Pérez Villamizar, tras la expulsión de Carlos Pino, funcionario venezolano de la embajada de Caracas en Bogotá acusado de “espía” por el gobierno del vecino país.
Tras conocer la noticia, Pérez aseguró que se va “con la frente en alto» y con «dignidad”.
“No hay ningún problema, me voy porque me botaron, no hay problema”, expresó a los medios de comunicación, a los que resaltó que no brindaría ningún tipo de declaraciones.
El diplomático solo cuenta con 48 horas para abandonar el país.
El gobierno de Colombia consideró la expulsión del cónsul como una represalia por la expulsión del funcionario venezolano, quien, según la vicepresidente colombiana, Marta Lucía Ramírez, no estaba certificado como diplomático.