Las protestas de los venezolanos cansados de la crisis llegaron este lunes a las narices del gobernador del estado Zulia, Francisco Arias Cárdenas.
Un grupo de zulianos llevó sus reclamos al gobernador chavista justo al frente de su residencia en Maracaibo e intentaron violentar las puertas para entrar a la sede de la Gobernación.
Sin embargo, los funcionarios de seguridad al servicio del régimen rojo rojito reprimieron a los manifestantes que decidieron alzar su voz contra Arias Cárdenas: lanzaron bombas lacrimógenas hasta dispersarlos.
Recordemos que la dirigencia opositora inició una agenda de calle hace una semana como respuesta al golpe de Estado que dio el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) a la Asamblea Nacional (AN) y que fue considerado como la confirmación de la dictadura de Nicolás Maduro.