Las protestas organizadas en Irán tras la muerte de Mahsa Amini, arrestada por la policía iraní por no llevar el velo de forma adecuada, dejó al menos 50 personas fallecidas producto de la represión de las fuerzas de seguridad iraníes.
La información fue dada a conocer el pasado viernes por Iran Human Rights (IHR), indicando que el balance al alza se explica por la muerte de seis personas por disparos de las fuerzas de seguridad en la ciudad de Rezvanshahr, en la provincia de Gilan (norte) el jueves, así como otras víctimas mortales en Babol y Amol, también en el norte.
Según la ONG, luego de la muerte de Amini se han registrado manifestaciones en unas 80 ciudades y en otros centros urbanos así como en la región de Kurdistán, en el norte de Irán, de donde era oriunda la joven, donde también se han contabilizado fallecidos.
“Al menos 50 personas han muerto hasta ahora, y la gente sigue protestando por sus derechos fundamentales y su dignidad”, declaró a la agencia AFP el director de la ONG, Mahmood Amiry-Moghaddam.
«La comunidad internacional debe apoyar al pueblo iraní contra uno de los regímenes más represivos de nuestro tiempo», añadió.
Las autoridades iraníes registran un balance oficial distinto de los disturbios, reconociendo a la fecha solo 17 muertos, indicando que cinco de ellos pertenecen a miembros de las fuerzas de seguridad.
Miles de personas respondieron este viernes en Irán al llamamiento de las autoridades y salieron a la calle para defender el uso del velo y denunciar a los “mercenarios”, tras una semana de protestas desatadas por la muerte de la joven que dejaron al menos 17 muertos, los organismos iraníes al parecer estarían bloqueando el acceso a WhatsApp e Instagram para impedir la organización de nuevas manifestaciones según denunciaron algunas instituciones en pro de los derechos humanos.
Mahsa Amini, de 22 años, fue detenida el 13 de septiembre en Teherán por vestir de manera “inapropiada” por parte de la policía moral, encargada de hacer cumplir el estricto código de vestimenta de Irán, posteriormente falleció tres días después en el hospital, su muerte ha provocado diversas protestas nocturnas en las principales ciudades de Irán, incluida la capital, Teherán.
Redacción Maduradas con información de Infobae
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