1,5 millones de vehículos deben pasar de combustible de 95 a 91 octanos, según cálculos del gobierno. El presidente Nicolás Maduro confirmó la intención de aumentar los precios de los combustibles y corregir el rezago que existe entre las tarifas actuales y los costos de producción.
La cifra oficial arroja una pérdida anual de 12,5 millardos de dólares para Petróleos de Venezuela. Sin embargo, el primer mandatario aclaró que la idea es emprender un plan que se ejecutará en 3 años. En una primera fase se pretende atender el problema que existe con la gasolina de 95 octanos, que se vende a 9 céntimos de bolívar.
Un estudio elaborado por técnicos del gobierno señala que el parque automotor en Venezuela llega a 4,1 millones de vehículos y 70% de esa cantidad (2,9 millones) utiliza la gasolina de mayor octanaje, es decir, la de 95. No obstante, el análisis indica que solo 33% de los automóviles que circulan en el país requiere ese combustible y el resto podría usar gasolina de 91 octanos. De acuerdo con los datos, hay 1,5 millones de vehículos que utilizan incorrectamente la de 95.
Las personas que tienen autos particulares y que viven en zonas periféricas de Caracas, pero trabajan en la ciudad suelen llenar el tanque por lo menos 3 veces por semana, por tanto pagan casi 12 bolívares de lunes a lunes, lo que suma 46 bolívares al mes.
La propuesta presentada por el ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, para que Pdvsa cubra sus costos, eleva la tarifa de 95 octanos en 2.683%. De tal manera que esas mismas personas –que pudieran vivir en Guarenas-Guatire, Altos Mirandinos, el litoral central o los Valles del Tuy– gastarán 108 bolívares semanales y 1.296 bolívares mensuales, a menos que reduzcan el consumo.
“Es conveniente corregir las pérdidas que afronta Pdvsa por culpa del subsidio de la gasolina, pero el plan que tiene el gobierno pretende subir el precio más de 28 veces. Esa cifra que presentó el ministro Ramírez está sobrestimada”, afirma el economista Rafael Quiroz, docente del posgrado de Hidrocarburos de la Universidad Central de Venezuela. “Consideramos que el precio de la gasolina de 95 octanos debería aumentar no más de 8 veces para cubrir los costos de producción. Por tanto, la tarifa no debería ser mayor de 77 céntimos de bolívar”, añade.
Rezago a medias
Los montos señalados por el Ejecutivo –a una tasa oficial de 6,30 bolívares por dólar– permitirán que Venezuela no figure más como el país con la gasolina más barata del mundo. Se pasaría a 42 céntimos de dólar, que semeja al precio de otros países petroleros como los Emiratos Árabes Unidos, Ecuador, Argelia e Irak. No obstante, continuará como la nación de América Latina con la tarifa más baja.
Actualmente la gasolina de mayor octanaje en Colombia se vende a más de un dólar por litro, es decir, más de 109 veces por encima de que se expende en Venezuela en este momento, lo que se convierte en el principal y casi único incentivo para el contrabando. Con la propuesta esa diferencia se reduce a 2,5 veces.
“Los datos presentados por el ministro Ramírez son una exageración porque no reflejan los costos de producción. Más bien corresponden a lo que Pdvsa deja de recibir si pudiera exportar esa gasolina”, dice el economista Luis Oliveros. “En nuestros cálculos las pérdidas de Pdvsa al cierre de 2013 estarán por 2,9 millardos de dólares, que incluyen los combustibles que se están importando”, añade.
En las cuentas del experto el precio de la gasolina debería incrementarse 10 veces para que se establezca una tarifa que cubra los costos, esto significaría casi un bolívar por litro. No obstante, advierte que todos los números deben revisarse si el Ejecutivo toma la decisión de devaluar la tasa de cambio oficial o comienza a utilizar como paridad de referencia la que rige en las subastas del Sicad.
Mototaxista y ejecutivo
Los mototaxistas eran inexistentes en abril de 1996, cuando el gobierno del presidente Rafael Caldera aumentó 10 veces el precio de la gasolina. Actualmente han pasado a convertirse en un gremio primordial del transporte.
Jonatan Gómez, mototaxista en la Ciudad Universitaria, dice que llena el tanque con gasolina de 95 octanos y paga un bolívar. “Cuando el día está bueno echo dos veces”, agrega. Es decir, paga 2 bolívares al día, pero con el plan del gobierno pasaría a 55 bolívares. “Si me aumentan a mí, yo tengo que subir la carrera”.
Arnaldo Figueroa utiliza su vehículo para trasladar a ejecutivos entre Caracas y el aeropuerto de Maiquetía. Una vez al día echa gasolina de 95 octanos y paga 5 bolívares, que incluye la propina. “A la semana puedo gastar entre 25 y 30 bolívares, pero con el aumento que dicen se me irán 600 bolívares. Tendré que subir el precio del servicio”, indica Figueroa.
ANDRÉS ROJAS JIMÉNEZ – el-nacional.com con información de Actualidad Venezuela