Nicolás Maduro nos ha acostumbrado a sus continuos errores o «metidas de pata» en sus discursos públicos, con errores lingüísticos, geográficos, culturales, etc. Esta vez Maduro dijo lo siguiente: «La única forma de combatir el fascismo en una sociedad, es como cuando uno tiene una infección muy fuerte, no sé, en algún lugar, en la garganta, por ejemplo, y no cede. Hay que buscar la pendicilina (sic)».
En el discurso del pasado martes, donde acompañó a los trabajadores petroleros, aseguró que el fascismo había que curarlo como una enfermedad que se cura con «pendicilina», en lugar de penicilina.
Como dicen: Errar es de humanos. Pero lo importante, es corregir los errores, situación que rara vez ocurre con el presidente.
Video Cortesía de: El Diario de Caracas
Vía Informe21.