El Gobierno del presidente Nicolás Maduro aseguró este domingo que Francia, que ayer se sumó a la iniciativa de seis países para denunciar a la nación suramericana ante la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntas violaciones a los derechos fundamentales, le ataca «con fines populistas».
A través de un comunicado, la Cancillería venezolana acusó a la nación europea de sumarse a la iniciativa en su contra ante la CPI, con sede en La Haya, «para mejorar la desprestigiada imagen del presidente (Emmanuel) Macron y su Gobierno», un acto que, señala, «se asemeja al mejor estilo racista de la ultraderecha francesa».
En tal sentido, Venezuela manifestó «su más contundente rechazo a la actitud injerencista e intervencionista» del Gobierno francés, y recordó que ambos países «comparten históricos vínculos sociales, económicos, políticos y culturales, alentados a través de los años a partir del respeto y la cooperación».
«La arrogante actitud asumida por el Gobierno francés impacta negativamente las buenas relaciones que ambos países han sostenido por décadas», se añade en el texto.
El pasado jueves, Colombia, Argentina, Chile, Paraguay, Perú y Canadá solicitaron a la CPI que investigue las presuntas violaciones a los derechos humanos en Venezuela ocurridas desde el 12 de febrero de 2014.
En el documento enviado por estas naciones a La Haya se pide además determinar «si una o más personas deberían ser acusadas» por crímenes de lesa humanidad, informó entonces la fiscal jefe de la CPI, Fatou Bensouda.
A la iniciativa de estos seis países americanos contra Venezuela se unió el sábado Francia, que señaló en un comunicado estar preocupada «en particular (por) el deterioro de la situación económica que obliga a cientos de miles de ciudadanos venezolanos a exiliarse y a buscar refugio».