Con el 99,4 % del escrutinio y una participación de 13 millones de personas -el voto era obligatorio en el referendo-, el «rechazo» obtuvo casi un 62 % de los votos por el 38 % del «apruebo» en la consulta para los chilenos sobre la nueva Constitución propuesta.
De esta manera, tras aprobar redactar una nueva Constitución (en 2020) y elegir a los miembros de la Convención para escribirla (en 2021), el país decidió finalmente a través de un plebiscito obligatorio este domingo rechazar la Carta Magna propuesta.
Esto hace que el mensaje desprendido tras la consulta, para algunos analistas, sea: «Una nueva Constitución sí, pero no esta».
En tanto, con la victoria del «rechazo», la Constitución de 1980, redactada durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y reformada de forma parcial en democracia, seguirá vigente.
Las celebraciones por parte de la oposición a la nueva Carta Magna no se hicieron esperar. Fueron muchas las personas que se congregaron en plazas, calles y avenidas, donde corearon: «El que no salte es comunista».