La noche de este martes un grupo de venezolanos cansados se alzó y tomó las calles para protestar a solo 450 metros (seis minutos a pie) del Palacio de Miraflores, donde se presume que vive Nicolás Maduro.
Los ciudadanos se concentraron en la Avenida Baralt para reclamarle al gobierno por las expropiaciones de las panaderías que inició la semana pasada. Quieren pan y que el gobierno se vaya. Así lo manifestaron.
Los gritos y cánticos parecieron le atormentalre las horas de sueño a Nico hasta que llegaron al lugar los colectivos de «paz y amor», quienes recibieron una “segunda” de los guardias nacionales para que se encargaran del asunto: disolvieron salvajemente la manifestación espontánea.
El pueblo de pie en la Av. Baralt contra las Expropiaciones y por su derecho a comer lo que quiera y donde quiera. pic.twitter.com/Y8oND0wjEM
— Julio Borges (@JulioBorges) March 22, 2017