La Fiscalía de Colombia anunció este lunes 10 de enero, que gracias a un trabajo en conjunto con la Administración de Control de Drogas (DEA) y con el Ejército del vecino país, fue incautado un ‘narcojet’ en Guatemala con más de una tonelada de cocaína.
De acuerdo a la información suministrada por el ente, la droga habría sido enviada desde zonas fronterizas con Venezuela por las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con destino a Centroamérica, donde sería recibida por contactos del cartel mexicano de Jalisco Nueva Generación.
Las autoridades colombianas precisaron que las panelas con el alcaloide llevaban las iniciales GI, que corresponderían a un capo de Tumaco, quien es el encargado de mover los cargamentos por tierra hasta la frontera con Venezuela para luego sacarlos por pistas clandestinas hacia otros países.
En concreto, durante las inspecciones fueron encontrados un total de 1.028 kilogramos de cocaína de alta pureza tasada en cerca de 32 millones de dólares.