Unas 50 personas han resultado heridas y 12 de ellas hospitalizadas tras una “fuerte sacudida” durante un vuelo Sídney-Auckland de un avión de Latam debido a un “fallo técnico” que hizo que el aparato se precipitara de forma repentina, indicaron la compañía, pasajeros y los servicios de emergencia de Nueva Zelanda.
Los heridos, uno con pronóstico grave y el resto con heridas moderadas y leves, fueron tratados por los servicios médicos después de que la aeronave, un Boeing 787-9 Dreamliner, aterrizara en el aeropuerto de la ciudad neozelandesa de Auckland.
“El vuelo LA800, que opera hoy la ruta Sídney-Auckland, tuvo un problema técnico durante el vuelo, lo que provocó una fuerte sacudida (…) Como consecuencia del incidente, algunos pasajeros y tripulantes de cabina resultaron afectados”, apuntó Latam en un breve comunicado enviado a EFE.
Si bien la aerolínea chilena no ofreció detalles del fallo técnico ni de cuándo sucedió el incidente, un pasajero relató a EFE una “caída repentina” unos 45 minutos antes del aterrizaje.
“Estaba quedándome dormido, sentado junto a la ventana en una fila de tres asientos, y con la sacudida abrí los ojos y vi a mi compañero del pasillo en el techo del avión, que estaba precipitándose… Pensé que estaba soñando”, afirmó a EFE Brian Adam Jokat, canadiense de 61 años que viajaba a Auckland para encontrarse con amigos.
Jokat, que llevaba puesto el cinturón de seguridad y dijo estar al “100% bien”, aseguró que antes del incidente “no hubo turbulencias, nada, ningún aviso”, y que en “unos segundos el avión volvió a enderezarse”, dejando a pasajeros tendidos en el suelo, con heridas, cortes y sangrando.
“Al principio había gritos, después solo silencio”, apunta Jokat, cuyo testimonio coincide con lo que otros pasajeros narraron a medios neozelandeses.
El Servicio de Emergencia Hato Hone St. John de Nueva Zelanda dijo este lunes 11 de marzo a EFE en un comunicado que su personal evaluó y atendió a un total de 50 personas, de las cuales una está en condición “grave”, sin que haya trascendido aún su nacionalidad, y el resto presenta heridas “moderadas” o “leves”.