Como resultado de su presunta participación en un esquema de lavado de dinero, la extesorera chavista Claudia Patricia Díaz Guillén y el exmiliar Alejandro «el Tuerto» Andrade destinaron gran parte de su fortuna a la compra de lujosos bienes valorados en miles de dólares.
Ambos son señalados en un comunicado del Departamento de Justicia de Estados Unidos, donde alegan que el empresario venezolano, Raúl Gorrín, pagó millones de dólares en sobornos a Díaz y Andrade, quien también ocupó el cargo de tesorero de la nación.
Presuntamente, Gorrín aseguraba la compra de divisas a precios favorables y posteriormente transfería el dinero a los extesoreros, quienes acumularon grandes sumas de dinero que utilizaron para la compra de jets privados, yates, casas, caballos purasangre, relojes de alta gama y una línea de moda.
Por su parte, Andrade fue sentenciado a 10 años de prisión en el 2018, por su participación en el entramado de lavado de dinero. Según sus propias declaraciones, admitió haber recibido más de $1,000 millones de dólares en soborno por parte de Gorrín.
Redacción Maduradas