Los equipos de rescate multiplicaron este martes 20 de junio sus esfuerzos para encontrar un sumergible con cinco personas a bordo que desapareció en el océano Atlántico cuando se dirigía a explorar los restos del “Titanic”, en una búsqueda desesperada cuando le quedan “unas 40 horas” de oxígeno a la nave.
La comunicación con el sumergible “Titán”, de 6,5 metros de eslora, se perdió el domingo, durante su descenso hacia los vestigios del mítico transatlantico, que se encuentran a casi 4.000 metros de profundidad en medio del Atlántico Norte.
En el sumergible viajan cinco personas, entre ellos el millonario y aviador británico Hamish Harding, presidente de la compañía de jets privados Action Aviation, así como el conocido empresario paquistaní Shahzada Dawood, vicepresidente del conglomerado Engro, y su hijo Suleman.
Los guardacostas estadounidenses y canadienses han desplegado buques y aviones en una intensa búsqueda aérea y marítima de la embarcación, equipada con oxígeno para 96 horas.
El capitán del servicio de Guardacostas estadounidense, Jamie Frederick, dijo en una conferencia de prensa que el rastreo de unos 13.000 km2 no ha dado “ningún resultado” hasta ahora.
“Sabemos que quedan unas 40 horas de oxígeno” en el sumergible y que el suministro de oxígeno se agotaría el jueves por la mañana, indicó.
Un avión P-3 de Canadá lanzó boyas de sonar en la zona de los restos del “Titanic” para tratar de detectar cualquier sonido procedente del pequeño sumergible.
La búsqueda, inicialmente restringida a la superficie del océano, ahora también se lleva a cabo bajo el agua.
El Instituto Oceanográfico francés informó de que iba a enviar un robot submarino para ayudar en las labores de búsqueda.
Entre los pasajeros se encuentra también el francés Paul-Henry Nargeolet, un veterano buceador y experto en los restos del “Titanic”.
Según informaciones no confirmadas, la quinta persona a bordo es Stockton Rush, director general de OceanGate Expeditions.