Al menos 1.440 personas en la localidad de Cumanacoa, en el estado Sucre, se encuentran en «refugios solidarios» luego de que perdieran sus viviendas como consecuencia del desbordamiento de un río durante el paso del huracán Beryl, según un balance preliminar ofrecido este miércoles 3 de julio por el Gobierno.
En un contacto virtual con Nicolás Maduro, el ministro de Hábitat y Vivienda, Ildemaro Villarroel, indicó que, en total, se computan 7.990 casas con algún tipo de afectación y, de momento, la pérdida total de 360 viviendas, cuyos habitantes se encuentran en «refugios solidarios, es decir, en casa de una vecina», lo que demuestra un «alto nivel de solidaridad del pueblo».
El ministro prevé que, antes de diciembre, se entregue un total de 188 viviendas a personas que perdieron sus casas, y señaló que se evalúa la posibilidad de reconstruir cerca de 50 que no estén en zonas de riesgo y otorgar 44 en otra región del país.
Por su parte, el jefe de Estado, quien anunció la creación de un puesto de comando presidencial en Cumanacoa, reiteró su solidaridad con los familiares de los tres fallecidos y aseguró que las acciones preventivas salvaron muchas vidas.
Señaló también que continúa la búsqueda de las cinco personas desaparecidas en la zona, donde hay unos 2.600 funcionarios, entre ellos de Protección Civil, bomberos y policías.
Según el balance oficial, el desbordamiento del río afectó también un mercado municipal, carreteras y seis de las 20 escuelas de la zona, de las cuales dos tienen daños graves, además de que provocó el colapso de siete puentes colgantes que comunican a varias comunidades.