«Tenemos que creernos que podemos hacer un gran partido», decía el argentino Fernando ‘Bocha’ Batista, entrenador de la selección de fútbol de Venezuela, un día antes de enfrentar a Brasil en la clasificatoria sudamericana hacia el Mundial de 2026… y sus jugadores creyeron.
Un hermoso gol de chilena de Eduard Bello en el minuto 85 dio el jueves a la Vinotinto un empate 1-1 ante el pentacampeón mundial en el estadio Arena Pantanal de Cuiabá, con lo que el equipo de Batista alcanza cuatro puntos en las primeras tres fechas.
El resultado cortó una racha de 15 victorias consecutivas que la Seleçao tenía como local en citas premundialistas.
Brasil se adelantó en el 50 con un cabezazo de Gabriel Magalhães después de un tiro de esquina cobrado por Neymar, pero Venezuela jamás agachó la cabeza, creyendo que podía igualar ante un adversario que deja escapar puntos como local por primera vez desde que Uruguay le sacó un empate 2-2 en marzo de 2016 en la ruta a Rusia-2018.
Los cambios de Batista salieron bien.
Bello había entrado como suplente, al igual que Jefferson Savarino, asistente de su gol con un centro desde el costado derecho, y Cristian Cásseres Jr, el hombre que inició la crucial jugada en la mitad de la cancha.
«Esto demuestra para qué estamos preparados, no somos un equipo que vamos a llegar a los partidos a ver qué pasa, somos un equipo que puede sacar resultados en cualquier cancha», subrayó, eufórico, el autor de la diana.
Chile es el próximo rival, el martes, en el estadio Monumental de Maturín, donde Venezuela venció 1-0 a Paraguay en septiembre con un penalti convertido por Salomón Rondón en los descuentos (90+3).
– «Mano, tengo fe» –
Único país de Sudamérica que jamás ha clasificado al Mundial, Venezuela venía de dos clasificatorias espantosas, con 35 goles encajados en la vía a Rusia-2018 y otros 34 en el camino a Catar-2022, en medio de un desfile de entrenadores y una grave crisis federativa por el ‘FIFAGate’.