Este viernes 27 de enero, se pudo saber que Nicolás Maduro habría recibido la visita de dos importantes exfutbolistas del Real Madrid y de la selección de Francia, en el Palacio de Miraflores.
Se tratarían del exdefensor español, Míchel Salgado, y del exdelantero franco-argentino, David Trezeguet, campeón del mundo en 1998. Ambos exjugadores regalaron camisetas a Maduro: Salgado le obsequió una del actual campeón de Europa, mientras Trezeguet le dio una de la subcampeona del mundo.
«(La reunión) reafirmó la voluntad de configurar sólidos vínculos con organizaciones deportivas nacionales e internacionales (…). (Se fortalecen) las relaciones de amistad con referentes históricos de clubes y seleccionados con proyección mundial para fortalecer el movimiento deportivo», aseveró el régimen.
A pesar de esto, fueron muchos los comentarios, en son de crítica, que recibieron las imágenes, tanto en contra de Maduro como de los exjugadores.
«Ridículos reunido con un dictador», sentenció Noel Hernández.
«Populismo puro. Ahora quiere caerle bien a Raymundo y todo el mundo. Suelta a los presos políticos», expresó @elguach47926878.
«Los jala jala», opino @SAcaraure.