Nicolás Maduro aseguró este jueves 12 de enero, en la presentación de la rendición de cuentas anual, que Venezuela dejó de percibir 232.000 millones de dólares en el sector petrolero debido a las sanciones impuestas por Estados Unidos desde 2015, si bien las restricciones a la industria llegaron en 2019.
«El país debió haber percibido y dejó de percibir 232.000 millones de dólares que hubieran ido a salario, a derechos sociales, a educación, a salud, a alimentación, a vivienda, a infraestructura, al desarrollo general del país», indicó el mandatario durante su discurso frente a los diputados de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), en Caracas.
Esta merma en los ingresos, prosiguió, fue provocada por quienes «llamaron e insistieron desde Venezuela y fuera de Venezuela» a imponer sanciones económicas, en alusión al sector de la oposición que promovió estas restricciones en el escenario internacional.
Esta escasez de divisas, «derivada de las sanciones criminales, impidió, como es normal, la inversión para la compra de materias primas, insumos, bienes de capital para mantener la actividad económica no petrolera«, sostuvo.
Dijo que el «impacto» en la economía no petrolera fue de 642.000 millones de dólares, sin precisar si este monto fue una pérdida de ingresos producto de las sanciones.