El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, dejó este miércoles 20 de enero la Casa Blanca junto a su esposa Melania, a pocas horas de la investidura de Joe Biden.
Así, EEUU pasa la página finalmente con la toma de posesión de Biden, que llega a la Casa Blanca presentándose como un unificador de un país sacudido tras cuatro años de presidencia de Trump.
Aunque a último minuto le deseo buena suerte a su sucesor en un mensaje de video, el temperamental millonario nunca lo felicitó y, en un hecho sin precedentes en 150 años, faltará a su ceremonia de investidura en Washington.
En el final de un mandato marcado por una avalancha de escándalos y dos “impeachments”, Donald Trump deja el poder en su nivel más bajo de popularidad, abandonado por una parte de su bando horrorizado por los hechos de violencia en el Capitolio el 6 de enero, de los cuales lo acusan de incitar.
Luego de una breve ceremonia en la base militar Andrews, en las afueras de Washington, abordó por última vez el Air Force One para ir a su club de golf Mar a Lago, en Florida, donde comenzará su vida de expresidente.
En una de sus últimas decisiones en el cargo, Donald Trump otorgó el martes un amparo de deportación por 18 meses (DED) a los venezolanos que se encuentren actualmente en territorio estadounidense afectados por “la situación de deterioro” provocada por el “gobierno autocrático” de Caracas.
También indultó a 73 personas, entre ellas a su exconsejero Steve Bannon, aunque la lista no incluye a Trump ni ninguno de sus hijos, derrumbando las especulaciones ventiladas en los últimos días por medios estadounidenses.