El joven Daniel Infante, quien resultó herido de bala durante las protestas en Mérida, se debate “entre la vida y la muerte”, según la última información oficial ofrecida por el ministro para el Transporte, Ricardo Molina.
Infante recibió un disparo en la cabeza cuando participaba, este lunes, en el plantón de la avenida Las Américas, cerca del bar restaurante Yuan Lin, donde manifestantes opositores se encontraban trancando la calle.
Al parecer, supuestos grupos de colectivos oficialistas dispararon contra los manifestantes y una bala alcanzó al trabajador de Trolebús y estudiante de la Universidad de Los Andes (ULA).
Infante es atendido en el Hospital Universitario de Los Andes, donde médicos hacen lo humanamente posible para salvarle la vida. La tarde de este lunes fue sometido a una cirugía.
Mediante cuentas en las redes sociales, relacionadas a la ULA, se han solicitado algunos medicamentos e insumos médicos para Infante. Si está en sus manos colaborar, aquí le dejamos la información de lo que se requiere y el contacto.