Ocho militares venezolanos fueron presuntamente secuestrados por irregulares colombianos en una zona fronteriza del estado Apure, donde se mantienen los enfrentamientos entre supuestos miembros de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), entre otras organizaciones guerrilleras colombianas, y funcionarios de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB).
Javier Tarazona, director de la organización no gubernamental Fundaredes, aseguró este martes 11 de mayo en una entrevista con el periodista Sergio Novelli que por medio de un video los guerrilleros exhortaron a Vladimir Padrino López, ministro de la Defensa del régimen chavista, a cesar el fuego a cambio de la entrega de los castrenses.
«Nosotros el domingo anunciamos que los señores Vladimir Padrino López y Remigio Ceballos conocen de un video, en el que la guerrilla prácticamente les pide el cese al fuego a cambio de darles los efectivos, que están en este momento siendo rehenes de guerra por parte de este grupo terrorista de las FARC en territorio venezolano», afirmó.
«Lamentablemente estos grupos siguen expandiéndose. El estado Sucre es la entidad número 21 donde se cuenta con presencia del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las FARC», agregó.
La guerra comenzó cuando Seuxis Pausias Hernández Solarte, alias Jesús Santrich, y Luciano Marín Arango, alias Iván Márquez, traicionan el Acuerdo de Paz firmado con el gobierno de Colombia, liderado para entonces por Juan Manuel Santos.
Al reunirse con la disidencia de las FARC, que dirige Gentil Duarte, quien no había firmado el Acuerdo de Paz, este les dice que son bienvenidos, pero que deben ingresar a la organización como combatientes rasos y ganarse nuevamente su posición de comandantes de la organización guerrillera. Desde entonces, están enfrentados.
Según versiones el régimen de Nicolás Maduro ha mandado a sus fuerzas militares para expulsar de Venezuela a las disidencias de las FARC y devolverle el control de las zonas fronterizas, clave para el narcotráfico, a Santrich y Márquez.