En Venezuela nadie se salvan, la inflación ataca a todo el mundo y los más pequeños de la casa también pasan penurias, los padres deben arreglárselas para costear la alimentación de los infantes y si quieren complementarla con un suplemento alimenticio, vaya que les costará.
Muchos de nosotros crecimos en la Venezuela donde era muy común que las madres complementaran la alimentación de sus hijos recién nacidos con suplementos y cereales, hoy eso es prácticamente imposible y cada día lo será más gracias a la inflación galopante que arrasa con el país.
Una simple muestra de esto, medio kilo de cereal Nestum que puede durar para poco más de 15 porciones, también se llevará el 15% de un salario mínimo.