El venezolano Yordis Lozada asesinó a una mujer embarazada en Ibarra, Ecuador, generando una ola de acciones violentas contra sus connacionales en ese país, lo que motivó a los parientes de la víctima a hacer un llamado para que cesen los ataques contra los criollos.
El hecho causó tanto rechazo en Ibarra que los ecuatorianos salieron a las calles armados con cuchillos, palos, piedras y fósforos para agredir a todo venezolano que se encuentre con aparente apoyo gubernamental.
Ante esto, un tío de la fallecida, pidió: “No generalicemos, no a la xenofobia, quien mató a mi sobrina fue un individuo, no una madre con dos niños en brazos que salió de su país buscando un futuro para sus hijos”.
Indicó también: “A Ibarra no le quiero ver las manos manchadas de sangre de gente inocente. El culpable está en la cárcel ya, él es el culpable, no la gente inocente”.