La fiscal general destituida, Luisa Ortega Díaz, logró escapar de las garras del régimen de Nicolás Maduro y se ha convertido para la comunidad internacional en una mina de oro que podría desnudar los negocios oscuros del régimen de Nicolás Maduro.
Foto: Archivo
Después de una huída espectacular (en lancha hasta Aruba y de allí en avión hasta Colombia), la fiscal se reunió con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y asistió a la reunión de fiscales de Mercosur en Brasil. En este último encuentro dio solo un “abreboca” de todo lo que sabe: Diosdado Cabello estaría involucrado con los sobornos de Odebrecht y el ex defensor del Pueblo Tarek William Saab estaría relacionado con actos de corrupción con Pdvsa.
Sin embargo, se espera que las denuncias más fuertes y reveladoras se den cuando la fiscal viaje a Washington, donde podría contarle a la justicia estadounidense todo lo que sabe de la cúpula de poder roja rojita.
Redacción Maduradas, con información de La Semana
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