Laura De Rosa, jefa editor de The Freedom Post, compartió un video del buque de la Guardia Costera de Trinidad y Tobago que disparó contra una pequeña embarcación pesquera que trasladaba a migrantes venezolanos a esa isla.
David Smolansky (@dsmolansky)
A través de su cuenta en la red social Twitter, De Rosa precisó que se trata del TTS Scarborough CG42 de la Guardia Costera de Trinidad y Tobago, “cuyos agentes dicen que ‘temieron por su vida’ frente a un peñero al que ellos interceptaron”.
Afirmó que el pasado sábado 5 de febrero, los funcionarios a bordo de ese buque dispararon contra los migrantes venezolanos, resultando un bebé de 1 año de edad fallecido y su madre con una herida de bala entre el seno y la clavícula.
“Como es evidentemente visible, principio de proporcionalidad en la amenaza no había; sin embargo, las ‘autoridades’ trinitarias en comunicado firmado por el teniente Kerron Valere, insistieron en escribir que fue ‘en defensa propia’ la acción en la que se emplearon municiones de fuego”, añadió.
Enfatizó que la “discrecionalidad y violación a los derechos humanos con la que actúan recurrentemente la Guardia Costera y autoridades de migración de Trinidad y Tobago contra los venezolanos no son aislados”.
“Esto está directamente vinculado al nefasto proceder de la gestión del Primer Ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, aliado del narcorégimen y muy cercano a Delcy Rodríguez, quienes dan carta blanca a Trinidad con estos actos, para disuadir a otros venezolanos de intentarlo”, aseguró.
En ese sentido, De Rosa señaló que a ninguno de esos países le conviene el flujo de migrantes, ya que Trinidad y Tobago “no quieren tenerlos en su territorio”, mientras “la salida de venezolanos afecta los números y la imagen de ‘normalidad’ que pretende sembrar” el régimen de Nicolás Maduro.
“Y mientras tanto, el migrante venezolano se ha convertido en puntal de la mayor crisis migratoria del mundo, superando a Siria y a Afganistán que viven en guerra. ¡Lo que no se ha entendido es que el socialismo también es una guerra, pero contra los ciudadanos del país donde se implanta!”, concluyó.