El hampa no discrimina. Nadie escapa de la inseguridad en Venezuela, donde tres policías fueron ultimados en las últimas 24 horas en los estados Sucre y Trujillo, y otro en el Distrito Capital.
El supervisor agregado de Polimiranda, Leandro García, recibió un tiro en la cabeza ayer a las 5:30 am en el kilómetro 3 de la carretera Panamericana. El hecho ocurrió cuando iba en una de las unidades que apoyarían la seguridad en el maratón de la CAF, que se hizo este domingo en Caracas. Fueron emboscados por 15 hombres. García fue llevado al hospital Periférico de Coche donde lo operaron y murió.
El comisario José Domingo Urbano Saboya, de 42 años de edad, jefe de Inteligencia del Sebín de Carúpano, estado Sucre, murió de un tiro en el dormitorio de ese organismo, ayer a las 2:00 am, cuando el subinspector Eduardo José Ramírez Armas, de 28 años, quien estaba ebrio a pesar de encontrarse de guardia, llegó al dormitorio para acostarse, pero manipulando su pistola se le escapó un disparo que impactó al comisario, quien falleció en una clínica.
Para las averiguaciones, el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas colectó una pistola Pietro Beretta, una botella de anís El Piache, sábanas, almohada y toalla de la víctima, reseñó El Nacional.
El oficial Juan Saavedra, de la policía de Carache, estado Trujillo, también murió ayer al ser atacado por un grupo delictivo que dirige un hombre conocido como el Colombia. Luego hubo un enfrentamiento de funcionarios de ese organismo con los miembros de la banda, y cinco de estos fallecieron. Serán identificados mediante necrodactilia.
Les incautaron una escopeta Winchester calibre 16, una granada fragmentaria y 3 pistolas 9 milímetros con 2 cargadores.