José Ricardo Álvarez, presidente de la Federación de Asociaciones de Cañicultores de Venezuela, aseguró que de los 10 centrales azucareros que se encuentran actualmente en manos del gobierno 8 no han comenzado a moler caña todavía, agregando que «de 85 toneladas que producía el sector por hectárea, se descendió a 55».
Aunado a ello, los productores solicitan al Ejecutivo que se incremente el subsidio a 8 bolívares por kilo, y que se les permita subir de un 30 a un 40% la cantidad de producción destinada al consumo industrial.
La producción nacional en 2014 se ubicó en 514.000 toneladas. De ese total, 20% correspondió a los centrales controlados por el Estado y 80% a los privados. Este año, el gremio calcula que la producción descenderá a 450.000 toneladas, lo que representa una caída de 12,4% con respecto a la zafra anterior y el aporte de los centrales estatales, que aún no han comenzado a operar, será inferior al año pasado. “De 85 toneladas que producía el sector por hectárea se descendió a 55 toneladas”, indicó.
Álvarez señaló que la caída en la producción está asociada a los retrasos en el suministro de insumos, como herbicidas y fertilizantes, que Agropatria despacha después de la cosecha. También afecta la falta de repuestos de alta rotación que tienen paralizados los tractores, cosechadoras y camiones. Destacó además el rezago en los precios, que tiene a los productores sin recursos para la cosecha. “No hay dinero para pagar lo que piden los núcleos de cosecha y la caña se quedará en la tierra”, indicó.
Los cañicultores se reunieron ayer en asamblea en Caracas. Posteriormente manifestaron ante la sede del Ministerio de Agricultura y Tierras para exigir el incremento del precio del kilo de azúcar al productor a 24,86 bolívares de 10 que paga a la fecha.
Los productores piden al Ejecutivo que incremente el subsidio a 8 bolívares por kilo de azúcar y que permita a los centrales azucareros subir de 30% a 40% la cantidad de la producción que pueden vender para el consumo industrial.
Con información de El Nacional.